Los Honores de Escocia, en la Cámara de la Corona del Castillo de Edimburgo, es la sala donde están las Joyas de la Corona de Escocia y el denominado "tesoro real escocés". Las Joyas de la Corona de Escocia se conocen con el nombre de "Honours of Scotland". Este tesoro real se compone de la Corona, el Cetro y la Espada del Estado. Todos estos objetos se conservan en muy buen estado y son uno de los conjuntos de atributos de la cristiandad más antiguos que existen.
Las Insignias de Escocia, o las Joyas de la Corona de Escocia, están custodiadas en el Castillo de Edimburgo y no se permite realizar fotografías, por lo que la única forma que hay de descubrir Los Honores de Escocia es visitando el Castillo y dejándose impregnar por su Historia y sus leyendas.
La Corona de los Honores de Escocia
En el siglo XIV Roberto I, "The Bruce", fue coronado con un aro de oro, pues la corona antigua la robó también Eduardo I y se la llevó a Inglaterra. Según la leyenda, el oro de la corona de Roberto I, que provenía de las minas de oro de Escocia, se usó para hacer la actual corona. Cuenta la leyenda que el oro de la corona de Bruce se utilizó para fabricar la actual corona y además procede de las minas de oro de Escocia.
El Cetro, la Vaina, el Cinto y la Espada de los Honores de Escocia
El resto de Joyas de la Corona de Escocia son el Cetro, la Vaina, el Cinto y la Espada. Todos estos objetos son del reinado de James IV (1488-1513), regalos del Papa Julio II. James IV fue el primer rey escocés que fue coronado con una Corona Imperial rematada con arcos que había añadido su padre James III.