HMP Belfast, también conocido como Crumlin Road Gaol, es una famosa prisión situada en la carretera de Crumlin en el norte de Belfast. Es la única cárcel de la época victoriana (1845) que queda en Irlanda del Norte y que cerró sus puertas como prisión en 1996. Es conocida cariñosamente como "el Crum".
El 31 de marzo de 1996, Crumlin Road Gaol cerró de golpe sus puertas por lo que muchos pensaban que sería la última vez, pero fue anunciado un proyecto de restauración en agosto de 2010. El 19 de noviembre de 2012 las cadenas se cayeron y HMP Belfast renació como una importante atracción turística de la ciudad de Belfast y centro de conferencias.
Es un lugar muy interesante que si estas en Belfast no puede pasar desapercibido, sobre todo porque era la cárcel de terroristas de ambos bandos de los famosos conflictos de la historia de Irlanda del Norte.
Visitas a la Prisión Crumlin Road de Belfast
Puedes hacer un tour guiado por la prisión y escuchar acerca de la dura historia de este lugar de Belfast contada como un cuento. Desde lo que llevaron a cabo las mujeres y niños detrás de sus paredes a través de la segregación política de presos republicanos y unionistas, y además conocer el motivo de por qué se tomó la decisión de cerrar la cárcel.
Durante el recorrido de la prisión, se le llevará a visitar el túnel subterráneo, que era utilizado para conectar la cárcel con el Palacio de Justicia Crumlin Road y para transportar a los prisioneros a la corte.
Además, podrá sentarse en la silla del gobernador y ver todas las celdas y salas donde fueron ahorcados algunos de los hombres.
Historia de la Crumlin Road Gaol de Belfast
Diseñada por Sir Charles Lanyon, costó alrededor de 60.000 Libras. Era una de las prisiones más avanzadas de su época. La cárcel de Crumlin Road fue construida originalmente para contener entre 500 y 550 presos en celdas que medían 12 x 7 pies (3,5 x 2 metros).
Fue también la primera prisión en Irlanda construida de acuerdo con "El Sistema Independiente", destinada a separar los prisioneros el uno del otro, sin comunicación entre ellos. Más tarde, sobre todo en la década de 1970, tanto como tres prisioneros fueron colocados en cada celda.
A pesar de ser conocido como el Alcatraz de Europa, hubo una serie de intentos de fuga con éxito en la cárcel. El primer escape fue registrado en 1866.
La Agencia de Medio Ambiente de Irlanda del Norte ha dado la condición de edificio protegido por su importancia arquitectónica e histórica, así como al palacio de justicia Crumlin Road, que actualmente se encuentra en ruinas, situado frente a la cárcel y el túnel bajo la carretera principal que conecta los dos edificios. Una recomendación para visitar esta atracción turística de Belfast es llevar ropa cálida, cómoda y zapatos planos.